Cuando fotografías a personas -y mascotitas- es real que esos momentos solo se cuentan una vez. Son historias irrepetibles, por más que intentemos una «segunda toma», nunca puede quedar igual y el por qué es casi obvio: el sentimiento se vive en el momento, es una chispa, algo que no se calcula, solo sucede y se va. ¿Entiendes por qué es vital que te encuentres con los fotógrafos de tu vida?
Atesorar tu historia, mantenerla siempre viva para volver a esos tiempos felices es una suerte que tienes al alcance de un click.